Pensamos que eran simples rounds de sombra, que las diferencias en el proceso de entrega-recepción eran hasta normales, pero no es así, se tiran a matar los dos peleadores en el hexágono.
Nos habían dicho que se habían dado los primeros desencuentros entre el equipo de transición de AMÉRICO VILLARREAL ANAYA, encabezado por JESÚS LAVÍN VERÁSTEGUI y el equipo de FRANCISCO JAVIER GARCÍA CABEZA DE VACA que es comandado por GERARDO PEÑA FLORES, pero realmente las cosas son más complicadas de lo que se dice.
Para muchos es normal, pues es difícil que se entiendan un contador y un abogado, pues para comenzar pertenecen a dos mundos distintos, con pensamientos diferentes. Es dificultoso que prospere una relación cuando ya existe un prejuicio entre ambas partes.
Cualquier relación está condenada al fracaso, cuando una de las partes pretende jugar con el complejo del buitre, tratando de quedarse con la carne corrompida y ni siquiera dejar los huesos.
Las diferencias no se ven bien, cuando en realidad se esperaba un espíritu de cooperación entre ambas partes, sobre todo la saliente, que son los más interesados en satisfacer dudas para evitar complicaciones futuras, pero no fue así.
Por el contrario, se registran malas acciones por parte de la actual administración, para menguar el arranque del gobierno morenista que toma posesión a partir del primero de octubre.
JESÚS LAVÍN VERÁSTEGUI, representante del equipo de los 400´s de la 4T, sufre golpe tras golpe, desprecio tras desprecio, por parte de la actual administración y ayer presentó una serie de quejas por actos irregulares.
Tiene motivos de sobra para amargarse, por principio, acusa que el gobierno saliente suprime y adiciona puestos directos de última hora.
Este fenómeno se registra en casi todas las dependencias, pero se encuentra más marcado en la estructura de la oficina del Gobernador, el Sistema Dif Estatal, Seguridad Pública y Bienestar Social.
Actualmente suprimen y adicionan puestos directivos, por lo que cambia la estrategia formulada para la recepción gubernamental.
Sin decir agua va, sin conocer motivos, ni razones, tras 5 años y 10 meses, de pronto se dieron cuenta que su organigrama no era el adecuado, por lo que realizan cambios de sus titulares a seis semanas de terminar la administración.
LAVÍN en estos momentos analiza efectos y motivaciones de estos cambios repentinos, aunado con el hecho de que el Estado no cuenta con manuales de operaciones, ni reglamentos interiores, lo cual es grave al no existir un respaldo.
Ahora trabajan para que esos cambios no afecten el proceso de transición, pero es indudable que pretenden infligir el máximo daño posible, como son la basificación de más de 4 mil burócratas.
Los americanistas juegan limpio, por eso anuncian que las bases que fueron entregadas serán revisadas, sólo se salvarán aquellas que sean justificadas, merecidas, que cumplan con el perfil, tengan la preparación, experiencia, antigüedad, correspondientes.
AMÉRICO pretendía hacer el proceso en los mejores términos, pero debe entenderse que eso no es posible, cuando alguna de las partes involucradas es contagiada por el síndrome del buitre y pretende quedarse con el resto de la carne.
Por más voluntad que exista para hacer la entrega-recepción, dadas las condiciones que existen se espera un enfrentamiento a fondo, donde más que rounds de tanteo, se lanzan golpes con todo el odio buscando el nocaut.
El vuelo del buitre siempre es en círculos y buscando la carroña.
Bueno, por hoy es todo.
Adiós y aguas con los patinazos…
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El vuelo del buitre
