Los críticos de que ANTONIO LEAL DORIA haya dejado la candidatura de mayoría en el XIV distrito y se instalara en la segunda posición plurinominal de MORENA, no atendieron al hecho de que la relación por la primera vía no cumplía el principio de paridad de género y el insaculado que fue relevado carecía del requisito de militancia.
Esos fueron los argumentos, imbatibles, que propiciaron las adecuaciones en la propuesta originalmente ventilada, protagonizada por el Presidente del Consejo Estatal morenista.
Ya que si la relevista candidata de mayoría, NORA HILDA DE LOS REYES, fue candidata -perdedora- a la alcaldía de Villa de Casas abanderada por el PRI y su esposo, PEDRO ALONSO PÉREZ, pertenece al viejo “clan de los PEDROs”, que de la mano del PAN-gobierno retomó el control del PRD estatal, es otro cantar.
De suyo, sería una versión que se contrapone en la voz de los críticos, repartiendo padrinazgos, pues su efímero debut tricolor sucumbió a los embates azules, precisamente.
“El trabajo para sacar a nuestros candidatos consumió la atención y el esfuerzo en el partido”, respondió el dirigente estatal panista, KIKO ELIZONDO, a pregunta expresa si la mano del PAN habría estado metida en la selección de candidatos de otros institutos políticos, como han pretendido algunos.
¿Usted vio algún truco?, prolongó la pregunta al reportero que le inquirió, durante la reciente conferencia de prensa concedida, tras el registro de los candidatos ante el IETAM.
Para los efectos mediáticos, las primicias Maniqueas en los extremos del blanco y el negro resultan harto socorridas, pero las escalas de grises abren abanicos extensos, no siempre matizadas de sadomasoquismo y otras perversiones.
Ciertamente, LEAL DORIA puede considerarse dentro del “ala moderada” de MORENA, como para que alguien considere no vaya a hacer mayor barullo en la próxima legislatura, a la que se perfila va por la libre, además con posibilidades de coordinar la bancada, del tamaño que vaya a ser.
Pero más allá de las implicaciones domésticas, es esa corriente la que está dominando en el mando central de su partido, así que no necesitaban influencias externas para consumar el desenlace, como se ha dado en la selección de los candidatos tamaulipecos.
De aquellas alianzas que desplazaron a IDN y JORGE VALDEZ del mando estatal perredista, para formar la reciente coalición con el PAN, también sale la primera posición en la lista plurinominal del partido del sol, en JUAN MANUEL RODRÍGUEZ NIETO, así como la de mayoría en el VII distrito en JOSÉ ALFREDO CASTRO OLGUÍN, el combativo primer síndico en el primer periodo de la alcaldesa panista MAKI ORTIZ DOMINGUEZ en Reynosa.
A él también le agradecen, recio y quedito, la nominación otros candidatos perredistas en otros distritos de Reynosa y Río Bravo, en una estrategia que también hay quienes quieren remitir a la influencia panista, pero no puede disociarse de afanes de grupos internos, en disputa que data desde que el PRD es partido.
Y sí, el incendiario discurso del dirigente petista ALEJANDRO CENICEROS MARTÍNEZ, puntero en la lista pluri de su partido, históricamente ha tenido su dosis de institucionalidad, también acorde con las vocaciones centrales partidistas.
Algo que reclamarán los marginados en la feria priísta a su dirigente YAHLEEL ABDALA CARMONA, puntera en la lista propia, como en el segundo enlistado, el dirigente estatal campesino “extemporáneo”, FLORENTINO SAENZ COBOS, más allá de la pretendida incidencia del tío exgobernador para el cuarto CARLOS MORRIS TORRE, o el origen geográfico, que se quiere hacer político en la tercera nominada, la reynosense MARÍA OLGA GARZA RODRÍGUEZ.
Una tendencia priísta, de proclividad panista, en voz de los críticos maniqueos que en las candidaturas de mayoría en Matamoros de Matamoros (IRMA CASTILLO, LUPE REYES y HÉCTOR SILVA), quieren terciar con el pretendido padrinazgo del exalcalde CHUCHÍN DE LA GARZA, recientemente reclutado para un cargo en el gobierno estatal azul.
La insistencia sobre el “bajo perfil” de los candidatos en general, para suponer una próxima legislatura dócil y maleable, gane quien gane, en el caso del PRI, por ejemplo, no se detiene en el hecho de que los personajes históricos fueron quienes construyeron su derrota y dominando los intereses particulares, no estuvieron por invertir sus capitales en empresas de alto riesgo, como la elección del tránsito.
Los candidatos de las opciones político-partidistas de alto impacto, siguen siendo emergentes, como para remitirlas al rasero de la popularidad y está por verse, quiénes de ellos trascienden primero al triunfo en las urnas y después, saber de su “rendimiento” en el trabajo legislativo.
Son albures, pues, que reposan más, en los oficios de los partidos y gobiernos que las cobijan, sobre los que priva la medición de fuerzas.
Veremos y diremos.
“Casi me pierdo güey”.
Como en el chiste del puerquito, el exlíder de los tortilleros victorenses, ENRIQUE YÁÑEZ reclamó al Presidente AMLO, en un escrito a través de redes sociales, que mientras él puso todo su trabajo político y económico al servicio de MORENA y hasta arriesgo su vida, la de su hijo y un amigo en ello, otros –“que nada aportaron”- fueron los beneficiados con las candidaturas.
“Noticia-nueva”.
Frente a Palacio Nacional, igual un octagenario oaxaqueño “se crucificó” pidiendo una audiencia con el Presidente de la República, remitiendo derechos al hecho de que, también dijo, “los ejidatarios me quitaron todo mi proyecto acuícola, quemaron mi casa, mi rancho y a tres años de lucha mataron a mi mujer (…), todo por apoyarlo”.
Amarrado de manos y pies a un poste en forma de cruz, exigía una audiencia.
En la sesión de Diálogos en Claroscuro, cada uno de los integrantes dedicamos un recuerdo a la memoria de FERNANDO PAEZ, compañero y amigo quien recién murió en accidente carretero y de quien guardamos buenos recuerdos e incontables anécdotas.
El invitado de la semana, OSCAR VILLA GARZA, compartió las políticas, estrategias y proyectos que desde la titularidad de la Comisión Estatal contra Riesgos Sanitarios despliega, al servicio de los tamaulipecos, de los empresarios y del propio gobierno que representa.
Panista de pura cepa, empresario neolaredense y debutante en el servicio público, el titular de la COEPRIS dice que con sus compañeros, familiares y amigos, siempre aspiró a que las cosas se hicieran bien desde el gobierno y ahora que ha tenido la oportunidad de estar del otro lado del mostrador, viene dando todas sus capacidades y esfuerzos para satisfacer esos postulados.
Depurar las estructuras de “aviadores” y malos elementos, capacitar, dar la confianza al personal operativo, investigar las quejas y denuncias, modernizar física y tecnológicamente la dependencia, optimizar los procesos, van rindiendo frutos puntuales.
Aunque los objetivos no son recaudadores, los ingresos se han multiplicado aplicándose y cerrando el paso a actos deshonestos, mejorando la atención a los empresarios en sus trámites y asegurándose que la población no se exponga a riesgos sanitarios.
Con principios y vocaciones; sin filias ni fobias, asegura.