Mientras avanzan las campañas en 6 estados, todos en franca beligerancia. Aguascalientes, Durango, Hidalgo, Oaxaca, Quintana Roo y Tamaulipas, muchos se preguntan por el futuro de Claudia Sheinbaum, Marcelo Ebrard, Adán Augusto López y Ricardo Monreal.
Los 4 quieren relevar a AMLO en 2024 y mientras que el zacatecano juega a los dados, los tres primeros están de rol buscando votos personales, no necesariamente respaldando a los gallos de su partido.
Claro, donde quiera que van, clonan el clásico de que están ahí para respaldar, pero con excepción de Adán, quien tiene todos los recursos para ayudar institucionalmente, los dos restantes echan rollo cumplidor.
En ese contexto muchos piensan, al que deben encerrar en la caja de los muñecos raros es a Cuitáhuac García -gobernador de Veracruz-, representante de lo peor de los ejecutivos locales guindas. Otros preguntan.
Marcelo Ebrard tiene el valor o le vale, es decir, está dispuesto a seguir manteniéndose como el Gran Humillado de su carnal AMLO, o si de pronto baja de peso y se pone el overol más allá de la marca de la Cuarta Transformación.
Yo no lo sé, pero sobran los que le ven bien y más allá de las encuestas, le sabe, tiene la dosis de perversidad que se requiere, conoce el triperío de la seguridad y si se ocupa, hasta “parle français”.
Ese es un gran tema, de lo que está pasando en el país, donde les comento, en Aguascalientes, en Oaxaca, Hidalgo y en Tamaulipas solamente va la gubernatura.
Pero en Durango adicionalmente a la jefatura estatal, están las 39 presidencias municipales, 39 Sindicaturas, y 327 Regidurías. Igual que en Quintana Roo donde se juegan la gubernatura, 15 diputaciones MR y 10 diputaciones RP.
Y aun así el alboroto es intenso, especialmente en Tamaulipas donde no nos cansamos de decir que los que está en juego no es una silla. Si no, todo lo que está en el aire, en la tierra, en el mar y la vida de las personas.
Suena a lugar común, hablar de playas, puentes de gas o de petróleo, pero sin ludas en nuestra entidad y en las cinco entidades restantes, todo tiene que más con la fortuna de todos, más allá de los presupuestos.
Las cosas avanzan y sin salirnos del asunto es evidente que de entre Claudia Sheinbaum, Marcelo Ebrard, Adán Augusto López el más fuerte por lo que representa en el corazón de AMLO es su paisano.
Que la Sra. Claudia tiene muchos infiernitos que resolver, empezando por la certeza de que la oposición ya le comió la mitad del mandado en la Ciudad de México, mientras que el “Carnal Marcelo” deberá tomar una decisión más tempramo que tarde.
Y en todo esto, como patito feo, Ricardo Monreal quien sigue obstinado en ser empleado de una 4T que no le respeta. Y cuando digo eso, me refiero al jefe real de este movimiento-partido.
Aún así, se monta en su caballo y amaga fino… “Voy a estar en la boleta de 2024, espero que sea con Morena”.
Lo mejor de cada casa…
Y los ojos siguen en la frontera donde ya veremos, por lo pronto, que en Matamoros les llovió duro y por lo mismo Mario López se aplicó pata atender oportunamente a la población.
Lejos de malas grillas, el reporte es que personal de diversas áreas del Municipio coadyuvan con la Junta de Aguas y Drenaje de Matamoros, para desaguar las más de 30 colonias afectadas con las precipitaciones pluviales estimadas en cuatro pulgadas, la cuales trajo consigo el sistema frontal número 47.
Y el segundo en lupa, en microscopio electrónico es Reynosa, donde la especulación está al 1000 %, luego de la licencia de “Makito” que no tiene más que dos caminos.
Ayudar su partido o fingir demencia… ya veremos. Recordemos que los medios y las autoridades han enviado señales de algunos conflictos de carácter judicial que no se han cerrado.
Del cuarto piso.- Y hasta nos parece normal lo que revela Marcia Laura Garza Robles, presidenta de la Comisión Especial de Procedimientos Sancionadores, en el sentido de que de enero a la fecha, el Instituto Electoral de Tamaulipas le ha dado entrada a poco más de 70 denuncias, en su mayoría interpuestas por la candidatura común de Morena y la coalición “Va por Tamaulipas”.
Nostra Política.- Ley número 4. «Cuando intente impresionar a la gente con palabras, tenga en cuenta que cuanto más diga tanto más vulnerable será y tanto menor control de la situación tendrá. Incluso cuando lo que diga sea sólo una banalidad, parecerá una idea original si la plantea de forma vaga, abierta y enigmática. Las personas poderosas impresionan e intimidan por su parquedad. Cuanto más hable, mayor será el riesgo de decir alguna tontería.» Robert Greene.
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