La posibilidad de que EUGENIO HERNÁNDEZ FLORES deje la cárcel, está cada vez más cerca, después de que injustamente haya permanecido poco más de cinco años.
A GEÑO lo metió a la cárcel el ex gobernador FRANCISCO GARCÍA CABEZA DE VACA, apenas iniciado el gobierno de los “vientos del cambio”, a quien le fabricó delitos, en los tiempos de JAVIER CASTRO ORMAECHEA como titular de la Fiscalía Especializada para el Combate a la corrupción.
La instancia fue usada para persecuciones políticas y no precisamente para el fin social que fue creada.
Y lo mandó CABEZA DE VACA detener, porque no le gustaba que GEÑO tuviera más simpatías ciudadanas, que pese a haber concluido su encomienda como gobernador, la gente lo seguía queriendo mucho más, al entonces gobernante en turno.
A CABEZA DE VACA le caló y mucho que el güero ojos verdes tuviera mejores niveles de preferencia y simpatía ciudadana.
Y era tanto el coraje que le tenía CABEZA DE VACA porque a donde quiera que iba, siempre había algo que identificaba al gobierno de HERNÁNDEZ FLORES, sus obras y acciones.
Así estuvo acudiendo a la torre Bicentenario, al recinto ferial, al inicio de los periodos del Congreso local, encabezando ceremonias en el Polyforum Rodolfo Torre Cantú, entre otros lugares en los que insistimos, todavía está la mano del ingeniero HERNÁNDEZ FLORES.
Y ahí permanecerá todavía muchos años más, la obra de GEÑO en el parque Bicentenario.
Eso no lo alcanzó ni alcanzará a superar CABEZA DE VACA, ya no digamos de otras obras y acciones.
Hoy EUGENIO HERNÁNDEZ FLORES está a punto de salir en libertad.
Desde luego que la atención de muchos victorenses y tamaulipecos en general, está enfocada en la figura del ex gobernador y en espera de que la noticia se confirme en esta semana.
Como se dice durante las misas católicas, es justo y necesario.
De confirmarse la noticia, GEÑO saldrá con la frente en alto, consciente y seguro de que fue privado de su libertad por alguien que no es feliz.
Sabe que los delitos que le imputó CDV, le fueron fabricados usando las instituciones y utilizando testigos que también se inventaron.
A estas alturas, lo que desea EUGENIO HERNÁNDEZ FLORES es recuperar su libertad y tratar de recuperar lo que perdió por espacio de más de cinco años, al lado de su familia y amigos.
A diferencia de CABEZA DE VACA, habrá que decir que GEÑO no es rencoroso ni tampoco envidioso.
GEÑO se ha caracterizado por ser una buena persona, sin malicia, sociable.
Franco, directo; siempre dispuesto a extender la mano en señal de amistad.
Hoy, todo parece indicar que saldrá en libertad.
Qué cosas, precisamente en que lo mandó a la cárcel, ahora se encuentra escondido y temeroso de que le suceda lo mismo. Obvio que para este último no es cosa nueva, ya que en una ocasión pisó la cárcel. En fin.
alfredoguevara0@gmail.com
El envidioso
