La licencia que solicitó LUIS RENÉ CANTÚ el “cachorro” GALVÁN a su cargo de diputado local, por el Partido Acción Nacional, tiene sus razones.
Y aunque pudiera decirlo él o cualquier otra persona, que fue por motivos personales, es más falso que una moneda de tres pesos.
Incluso, podrán decir que se desligó del cargo de diputado local del PAN para incorporarse a la campaña del candidato a gobernador CÉSAR VERÁSTEGUI OSTOS el “truko”, pero también es una mentira.
¿Qué representa – en votos – el cachorro?, solo el de él y su familia, amigos, compañeros, es decir, lo que ya están contabilizados.
Por lo tanto, ya no podrá incorporar más, a menos de los que son considerados como indecisos hasta ahora.
De ser así, su incorporación a la estrategia o equipo de campaña, es tarde.
Y si antes no lo había hecho para no estorbar, ahora si lo hará, cuando lo haga en su carácter de presidente del CDE del PAN, cargo que habrá que decir, todavía lo ostenta, pero que tendrá que dejar en las próximas semanas.
O quizá pidió licencia, para estar en condiciones de ocupar un cargo en la próxima administración estatal. Pudiera ser.
La verdadera razón por la que LUIS RENÉ CANTÚ abandono su cargo como diputado local, obedece más a su actitud belicosa, conflictiva y casi golpeadora que había asumido al interior del Congreso local.
Como en el futbol, lo sacaron antes de que fuera expulsado.
Y es que, en más de una ocasión, el “cachorro” perdió los estribos, al calor de las acusaciones que se dan al interior del Congreso local, sobre todo con legisladores de Movimiento de Regeneración Nacional.
La última ocasión en la que LUIS RENÉ “el cachorro” CANTÚ GALVÁN se enfrasco en un pleito verbal, fue precisamente por el caso del desafuero de la diputada de Morena, ÚRSULA PATRICIA SALAZAR MOJICA.
Y fue nada menos con el que fuera diputado federal del PAN HUMBERTO PRIETO HERRERA, ahora legislador local de Morena, quien en más de una ocasión retó al “cachorro” a debatir pero con la ley en la mano, una pelea legal, no verbal como se dio hace poco más de una semana.
Incluso lo invitó a que le diera lectura a las propuestas y no solamente hablara por hablar.
Finalmente ahí quedaron las cosas.
Pero fue suficiente el motivo para que lo sacaran – porque él no quería abandonar la diputación local- y dejara de formar parte de la 65 legislatura.
Y es que, en esa lucha por el desafuero de ÚRSULA, lo que se necesita por parte del PAN es cabeza fría y el “cachorro” GALVÁN no la tiene.
Por el contrario, pareciera un cerillo que ante la menor chispa, se enciende.
El más beneficiado con la decisión que se tomó, es precisamente el presidente de la Junta de Coordinación Política FÉLIX el “moyo” GARCÍA, toda vez que ya no tendrá la sombra de LUIS RENÉ CANTÚ, que en más de una ocasión se arrepintió no haber soltado esa posición en el Congreso local.
Y es que, había ocasiones en las que el “cachorro” se olvidaba que era un simpe diputado más y se la creía de presidente de la Coordinación del Grupo Parlamentario del PAN. En fin.
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En política no se van, lo sacan
