El desfile de obreros con motivo del “Día del Trabajo”, cada uno de mayo llegó a su fin.
Desde hace poco más de cinco años que no se festeja con el desfile de contingentes, donde los trabajadores podían inconformarse a través de la exposición de mantas, lonas o cartulinas por las condiciones generales de trabajo.
La otrora Federación de Trabajadores de Tamaulipas, que durante años presidió EDMUNDO GARCÍA ROMÁN, perdió fuerza, presencia y, en el peor de los casos, credibilidad de sus propios agremiados.
El único liderazgo que persevera, es el de JUAN VILLAFUERTE MORALES Secretario General del Sindicato de Jornaleros y Obreros Industriales y de la Industria Maquiladora, gremio que convivió este Día del Trabajo”, con el candidato de la coalición “Va Por Tamaulipas”, integrada por el PAN-PRI-PRD CÉSAR VERÁSTEGUI OSTOS el “truko”, en Matamoros.
Y aunque en más de una ocasión JUAN ha pretendido “revivir” la Federación de Trabajadores de Tamaulipas, supuestamente en manos de GARCÍA ROMÁN, lo cierto es que no se ha decidido.
De hecho, el otrora dirigente de la Federación LEOCADIO MENDOZA REYES pretendió reivindicar a la FTT, pero sin éxito, producto de que dejó pasar mucho tiempo y como dice el dicho del viejito “cuando pudo no quiso y cuando quiso, no pudo”.
Los mejores tiempos de la FTT o la CTM en Tamaulipas fue quizá con DIEGO NAVARRO RODRÍGUEZ.
A lo largo de la administración panista estatal, a la Federación de Trabajadores de Tamaulipas prácticamente la sometieron por la vía de la ley del chino Zhenli Ye Gon, “copelas o cuello”.
Tan es así, que en contadas ocasiones se coordinaron para el desfile tradicional del Día del Trabajo. Los ningunearon e incluso, tuvieron que alinearse a la administración panista, so pena de ser sujetos de un revanchismo político.
Y aunque GARCÍA ROMÁN pudiera decirse que todavía “representa” a la FTT, lo cierto es que está limitado o bien, impedido para representar a los sindicatos de trabajadores que todavía están adheridos a esta Federación.
De hecho en las mismas circunstancias se encuentra la Confederación Revolucionaria de Obreros y Campesinos, es decir la CROC, a la que por muchos años aspiró también RAÚL PEGO NÚÑEZ pero por diferentes circunstancias nunca llegó a la dirigencia estatal.
Las dos organizaciones obreras llegaron a disputarse la firma de contratos colectivos de trabajo, aunque la FTT o la CTM siempre fue la predilecta en los gobiernos emanados del PRI.
Han sido cuatro o cinco años de sometimiento, de indefensión.
Sin brazos ni cabezas. Un movimiento obrero que perdió fuerza, presencia y peso político.
Y aunque pudiera decirse que ahí está el movimiento obrero, la realidad de las cosas es que carece de un liderazgo que además de representar en lo legal a sus trabajadores, encabece marchas, huelgas, plantones y movilización en aras de mejorar las condiciones económicas y sociales de sus agremiados. En fin.
alfredoguevara0@gmail.com