La renuncia de Carlos Romero Deschamps como dirigente del Sindicato de Petróleos Mexicano es un triunfo a medias del Gobierno de la Cuarta Transformación
En la víspera de la dimisión, los rumores eran incontenibles. En los días previos se había confirmado que las cuentas del líder petrolero, de sus hijos y de su esposa habían sido congeladas. Esta vez si era el inicio del fin del influyente tamaulipeco.
La renuncia no es suficiente. Sobre el ahora ex dirigente pesan denuncias que señalan la desaparición de negocios que pertenecían al sindicato.
“Se trata de tiendas de consumo, ranchos y granjas, fábricas de ropa, de zapatos y bloqueras, así como de cuatro bodegas en la Central de Abasto de Ciudad de México” refiere la denuncia presentada por dos disidentes del sindicato.
El patrimonio “desaparecido” también comprende hoteles en la capital del país, Poza Rica, Veracruz; Ciudad Madero, Tamaulipas; Acapulco, Guerrero; Villahermosa, Tabasco, y Mazatlán, Sinaloa.
La denuncia del 15 de marzo del año pasado refiere que estas propiedades desaparecieron desde que Romero Deschamps asumió la secretaría general tomando decisiones sin convocar a asamblea general.
Autoridades federales confirmaron que el tamaulipeco ya abandonó el país. La investigación arroja que habría salido de Mexico en los cinco días posteriores a su renuncia.
La fiscalía general investiga la ruta de salida de él y de once familiares más, según un oficio girado a la Agencia Federal de Aviación de la Secretaria de Comunicaciones y Transportes.
Mediante un oficio con carácter de “reservado y urgente” la Fiscalía Especializada en Combate a la Corrupción pidió a las fiscalías estatales envíen archivos y bases de datos de “registros, certificados, concesiones o permisos” para Romero Deschamps y cuatro empresas.
En Ciudad Madero, Esdras Romero Vega sigue despachando en la sección 1 del Sindicato de PEMEX pero sabe que la mano de la justicia puede alcanzarlo en cualquier momento.
Trasciende que cuando el sobrino consentido y uno de los hombres más allegados a Romero Deschamps se encuentra en su oficina, aumenta la vigilancia en los alrededores. Es muy evidente.
No solo se trata de su numerosos equipo de seguridad que siempre le acompaña sino también de trabajadores temporales adscritos a la sección 1 que son obligados a hacer guardias.
Ahí en Madero, el diputado local del PAN e hijo del Joaquin Hernández Galicia “La Quina”, -predecesor de Romero Deschamps-, Joaquin Hernández Correa aseguró que se deben ir todos y ser juzgados por actos de corrupción.
Entre los trabajadores se extiende la exigencia de justicia para recuperar los bienes sindicales. Hasta ahora, la caída de Romero Deschamps no es suficiente, es apenas un triunfo a medidas del Gobierno de la 4T.
maribelvillarreal@hotmail.es