Miramar y Bagdad reportaron gran afluencia en el primer fin de semana formal de este periodo de vacaciones de verano.
En la region sur de Tamaulipas y en Matamoros se concentra parte del operativo de seguridad Verano 2018 que desplegaron el viernes las autoridades del Gobierno del Estado encabezadas por el Secretario General de Gobierno con la representación del gobernador Francisco Garcia Cabeza de Vaca.
Se suman en coordinación elementos de la Policía Federal Preventiva y de la Policía Estatal para el resguardo en las carreteras apoyados en la atención a los viajeros por Los Ángeles Azules que brindan auxilio ante cualquier eventualidad. Tienen hasta mecánicos certificados.
De acuerdo al programa también aumenta la vigilancia de los elementos de la Secretaria de la Defensa Nacional y La Marina Armada de México. Sobre todo en aquellos municipios considerados como focos rojos.
Como muestra de la afluencia el sábado y el domingo previos se reportaron intensas filas de vehículos en los puentes internacionales, desde Nuevo Laredo hasta Matamoros.
Este periodo vacacional y el de Semana Santa representan un respiro a los prestadores de servicios turísticos.
La afluencia se estima superior a los dos millones de visitantes y se espera derrama millonaria. La zona de Tampico-Madero espera una ocupación hotelera promedio de un 70 por ciento.
Los 600 cuartos en el bulevar costero de Miramar se reportaban a un 63 por cierto de ocupación al inicio de esta semana. El sur de Tamaulipas se ha convertido en uno de los principales destinos nacionales de playa en turismo carretero.
En Madero, el futuro alcalde Adrian Oseguera anunció que el proyecto en Miramar es dotar de más alumbrado público y mejor drenaje con el objeto de propiciar más inversión.
Señaló que el objeto es crear parques acuáticos, clubes y hoteles de cinco estrellas que además de atraer más turismo crearán más fuentes de empleo.
Y cuando muchos mexicanos están de vacaciones llegó la renuncia del dirigente nacional del PRI, René Juárez.
Duró 75 días en el cargo, lapso en el que los priistas sufrieron la peor de sus derrotas al perder la presidencia de la Republica y no lograr el triunfo en ninguna de las nueve gubernaturas disputadas.
Por si fuera poco perdió el 35 por ciento los municipios gobernados y logró escasa representación legislativa.
Por eso es que Juarez reconoció que la transformación que demanda el partido es del mismo tamaño de la derrota del 1 julio.
Pidió reflexionar sobre el futuro del PRI porque aseguró que el partido se alejó de las bases y se instaló en la simulación.
Se pronunció por un partido en el que no sean las bases las que decidan y planteó la creación de la Comisión Nacional Consultiva para la refundación del PRI.
La dirigencia nacional del PRI fue ocupada por Claudia Ruiz Massieu.
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