Cd Madero Tamaulipas.18 de septiembre de 2020.- Se rindió un homenaje póstumo en la presidencia municipal de Ciudad Madero, a la vida y acciones realizadas por el ex alcalde de este municipio, Don Erasmo González Martínez quien falleció a los 85 años de edad el pasado miércoles.
En una urna conteniendo sus cenizas; el evento fue encabezado por el Diputado Federal Erasmo González Robledo hijo del homenajeado, y por el alcalde de la urbe petrolera Adrián Oseguera.
En el interior del palacio municipal el presidente Adrián Oseguera destacó: «Hoy estamos aquí para despedir a un gran ser humano, a un gran amigo, a quien fuera presidente municipal de Ciudad Madero a Don Erasmo González Martínez, lamentamos profundamente su partida y honramos su memoria, agradeciendo el legado dejado a los maderenses desde la administración que encabezó en 1981 a 1983».
Reconoció que, en el trayecto en la vida pública de Ciudad Madero, Don Erasmo González Martínez sembró las bases que hoy permiten tener a un municipio próspero.
Por su parte el Diputado Federal Erasmo Robledo, hijo del homenajeado dijo: «Don Erasmo sirvió siempre con alto patriotismo, lealtad, civilidad y amor a Ciudad Madero y a su gente. Don Erasmo ha sido para su familia amoroso hijo, hermano, esposo, padre y también abuelo, para la comunidad un ciudadano responsable y amigo sincero, siempre con una cordial sonrisa dispuesto a ayudar, destacando al ser un servidor público honesto».
En su discurso mencionó que sus dos grandes pasiones fueron amor por la familia y el gran don de servicio en la política, entendida como el arte del buen gobierno, dedicándole entusiasmo, inteligencia y acción sin límites.
En este acto solemne estuvieron presentes la ex presidenta del sistema DIF Doña Mercedes Robledo Ayala, esposa; sus hijas María Mercedes y Alma Delia, además de síndicos, regidores, invitados especiales, amigos y familiares.
En su intervención el Diputado Federal Erasmo González Robledo resaltó: «no podía el hombre y el político al final de su camino terrenal dejar de despedirse de este emblemático edificio.
Y desde él, despedirse también de su querido muy querido Ciudad Madero, comunidad a la que tanto sirvió, siempre te recordaremos, no es un adiós, es un hasta siempre Don Erasmo».