Matamoros.- (Maribel Villarreal) La amenaza de cortar la luz, desató una rebelión interna en el campamento migrante y los más de 800 centroamericanos ahí hacinados desde hace más de un año.
Los migrantes están denunciando acoso por parte de las autoridades del Instituto Nacional de Migración que pretenden cortar el suministro de energía eléctrica.
Luis Adrián Martinez originario de Honduras y con casi un año de residencia en el campamento, aseguro que pareciera que ya no los quieren ahí pero que ellos también son seres humanos y deben darles buen trato.
Aseguró que ellos consideran que el INM ya no quiere pagar la energía eléctrica y por eso pretenden desconectarlos
Dijo que ellos refieren que fue por el incendio por corto circuito de una carpa ocurrida hace un par de días y que la realidad es que unos niños le prendieron fuego.
Indicó que en el campamento se sienten encarcelados por las medidas que han adoptado las autoridades de no permitir el ingreso de nadie externo así como cerrar la reja durante las noches.